Comunicado oficial de la AJFS ante el debate por la consideración de la competición de fútbol sala como profesional

Comunicado oficial de la AJFS ante el debate por la consideración de la competición de fútbol sala como profesional

Comunicado de la Asociación de Jugadores de Fútbol Sala (AJFS) ante el debate generado por la consideración de la competición de fútbol sala como profesional, donde queremos manifestar que si bien a la AJFS le gustaría que el fútbol sala masculino (y femenino) fuera una competición profesional, al igual que el fútbol once, el baloncesto y el balonmano masculinos, la realidad es que, a día de hoy, no se dan los condicionantes para que la Primera y la Segunda División de Fútbol sala masculino merezcan tal catalogación.

Para argumentar este comunicado hemos enviado un escrito tanto al Consejo Superior de Deportes (CSD) como a todos los grupos políticos, con un breve examen del fútbol sala masculino analizando la situación actual de cada uno de los actores que lo integran con los siguientes puntos principales, más desarrollados en ambos escritos:

1.- SITUACIÓN DE LA ASOCIACIÓN DE CLUBES (LNFS).

La Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) se encuentra en el peor momento de su historia. La mitad de los clubes que militan en la Primera y Segunda División han abandonado la LNFS, que ya no es la voz autorizada de todos los clubes. Dificulta la toma conjunta de decisiones por parte de los clubes, algunas de ellas imprescindibles para la buena marcha de este deporte (p. ej. la falta de acuerdo entre los clubes en materia de derechos audiovisuales que impide la venta conjunta de estos derechos a alguno de los operadores del mercado con el consiguiente perjuicio económico).

2.- SITUACIÓN DE LOS CLUBES INDIVIDUALMENTE CONSIDERADOS.

Desde la AJFS pensamos que la situación actual de muchos de los clubes de fútbol sala de Primera y Segunda División se encuentra muy alejada de las exigencias que plantea una competición profesional:

  • Económicamente, muchos disponen de pocos recursos (subvenciones de organismos públicos, abonos anuales, y las aportaciones de patrocinadores) salvo contadas excepciones y salvo aquellos clubes que constituyen secciones de clubes de fútbol que son directamente financiados por éstos.
  • Jurídicamente, en la mayoría de los clubes de 2ª División la estructura de funcionamiento es bastante deficiente, exceptuando de nuevo aquellos clubes que son secciones de clubes de fútbol.
  • Sobre la Seguridad Social, en 1ª División la gran mayoría de los clubes cumplen sus obligaciones, tienen dados de alta a casi todos los jugadores en la Seguridad Social cobrando como mínimo el Salario Mínimo Interprofesional, si bien no todos cotizan por el cien por cien de las cantidades que abonan a los jugadores.

En la 2ª División, la mayoría de los clubes sólo tienen dados de alta en Seguridad Social al mínimo de jugadores que obliga el Reglamento de la Real Federación Española de Fútbol, es decir cinco jugadores con licencia profesional que para esta temporada 2022/2023 del total máximo de quince jugadores que pueden ser inscritos.

  • Respecto a los Pabellones, la mayoría de los clubes de 1ª División cumplen con solvencia los requisitos del Reglamento de la RFEF para competir. En 2ª División, sin embargo, a algunos clubes les cuesta cumplir esos requisitos mínimos, que no suelen cumplir, desde luego, los clubes de la categoría inferior (Segunda División B), de los cuales salen los tres clubes que ascienden cada temporada a Segunda División, existiendo renuncias de plaza por este motivo.

3.- RELACIONES LNFS-RFEF.

Las relaciones entre la LNFS y la RFEF son inexistentes desde que, cumplido el convenio de colaboración existente entre ambas, no llegaron a un acuerdo para su renovación, asumiendo la RFEF las competencias para la organización del Campeonato Nacional de Liga de Primera y Segunda División.

4.- RELACIONES LNFS-AJFS.

Hace varios años que la LNFS decidió cortar todo tipo de relación con la AJFS. No hay comunicación de ningún tipo entre ambas asociaciones.

La LNFS llevó al extremo la rotura de relaciones con la AJFS, que no se limitó al aspecto institucional, sino que fue total, negándose a dar cumplimiento al Convenio Colectivo LNFS-AJFS firmado en fecha 21 de septiembre de 2016 y publicado en el Boletín Oficial del Estado de 5 de abril de 2017.

5.- LA SITUACIÓN DE LOS JUGADORES DE PRIMERA Y SEGUNDA DIVISIÓN DE FÚTBOL SALA.

5.1.En materia de salario y Seguridad Social, la situación es muy diferente, como ya hemos apuntado, según se trate de jugadores de Primera o Segunda División.

En Primera División la mayoría de los jugadores son profesionales, tienen licencia federativa profesional y cuentan con un contrato dado de alta en la Seguridad Social pero: (i) no todos tienen un contrato continuado de 12, 24, 48… meses si tienen contratos de hasta 3 temporadas seguidas o más, (ii) en sus contratos laborales no se recoge la totalidad de las retribuciones reales, (iii) no todos cotizan a jornada completa, (iv) hay clubes que no cotizan por el cien por cien de las cantidades que abonan a los jugadores, y (v) el salario medio anual es un poco superior al salario mínimo interprofesional, que no se corresponde con la entrega y la exigencia de una relación laboral especial.

En Segunda División, la situación de los jugadores es muy distinta. La mayoría de los jugadores son semiprofesionales o aficionados o, carecen de licencia profesional y de contrato laboral y no están dados de alta en la Seguridad Social. La RFEF ha fijado un mínimo de licencias profesionales, que esta temporada es de cinco jugadores, con la finalidad de conseguir a largo plazo la profesionalización de la categoría, asunto donde la AJFS tiene puesto el foco para ir mejorando estas condiciones para las próximas temporadas.

En la Segunda División solo hay cuatro o cinco equipos cuyos jugadores perciben de media el salario mínimo interprofesional.  El resto percibe un salario que oscila entre los 200 y los 800 euros, existiendo jugadores que perciben únicamente una cantidad en concepto de compensación de gastos.

5.2.En materia de Convenio colectivo, en teoría, los jugadores de Primera y Segunda División están amparados por el Convenio Colectivo LNFS-AJFS que continúa en vigor. En la práctica, ese amparo es muy limitado, principalmente por dos razones:

1.- más de la mitad de los clubes de Primera y Segunda División no pertenecen a la LNFS, lo que pone en duda que a estos clubes pueda exigírseles el cumplimiento del Convenio Colectivo.

2.- desde hace cerca de tres años la LNFS se viene negando a dar cumplimiento al Convenio Colectivo y a todas las obligaciones derivadas del mismo: listado de contratos de los clubes pertenecientes a la LNFS, rechazo a la Comisión Mixta, falta de constitución del Fondo de Garantía Salarial, …

3.- En materia de protección, seguimos contemplando con preocupación que algunos jugadores de fútbol sala inician los entrenamientos de pretemporada sin tener tramitada la licencia federativa, sin gozar, por tanto, de la protección del seguro obligatorio deportivo asociado a ésta, y, en algunos casos, sin estar tampoco dados de alta en Seguridad Social.

De todo lo expuesto podemos extraer dos CONCLUSIONES muy claras:

  • La Segunda división carece de la estructura y condiciones para ser catalogada como profesional.
  • La PRIMERA DIVISIÓN si bien cuenta con la estructura y elementos para poder ser calificada como profesional cuenta con el grave inconveniente de que la Asociación que “supuestamente” engloba a los clubes, la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS), solo representa a una parte de éstos, está enfrentada a la RFEF, que es quien organiza la competición, y ha roto relaciones con la AJFS, que es el sindicato representativo de los jugadores, negándose a cumplir el Convenio Colectivo firmado con éstos.

La AJFS tiene claro que para conseguir la profesionalización de la Primera y Segunda División, o al menos de la Primera División a corto/medio plazo, se deben seguir mejorando las estructuras de los clubes, estabilizar sus fuentes de financiación, realizar un progresivo y sostenible aumento de fichas profesionales, que se mejoren las condiciones contractuales para asegurar ese salario mínimo interprofesional y que los clubes estén unificados nuevamente para poder volver a poner a nuestro deporte donde se merece a nivel de visibilidad mediática y social.

Finalmente, desde la AJFS estamos convencidos que la forma de poder conseguir en un futuro no muy lejano esta profesionalización del fútbol sala masculino pasa porque todas las estructuras que los conformamos, jugadores, clubes, y federación, vayamos en el mismo sentido, sin intereses partidistas ni personales.

En Madrid, a 15 de marzo de 2023.